Recursos Educativos para el Proceso de Aprendizaje
El desarrollo y utilización de recursos educativos para la enseñanza tradicional forma parte de un proceso natural de evolución, que acompaña innovaciones que ocurren no sólo en el ámbito de la educación. La introducción de la tecnología es fuertemente notada, desde técnicas exclusivamente presenciales hasta completa integración a ambientes virtuales. La segmentación de herramientas se hace para públicos y contenidos específicos, ya que cada uno exige una metodología distinta para alcanzar los objetivos.
Con ayuda de la tecnología, los alumnos están rodeados por mecanismos que los interconectan y los hacen desarrollar habilidades para solucionar un gran número de tareas en un corto espacio de tiempo. Por lo tanto, es necesario que el profesional de la educación consiga medios para amparar esa necesidad de agilidad y practicidad. La aplicación de técnicas de gamificación en contenidos embotados, por ejemplo, puede generar interés y facilitar el trabajo del profesor en la fijación del contenido.
La expansión de la enseñanza a distancia probó el surgimiento de los Ambientes Virtuales de Aprendizaje (AVA). Esta herramienta se utiliza para facilitar la interacción entre alumnos y profesores, además de la disponibilidad de contenidos, control de asiduidad del alumno y gestión de la disciplina como un todo. Puede ser utilizado en todas las modalidades de enseñanza (presencial, virtual y mixta), es actualmente considerado uno de los recursos fundamentales en el proceso de aprendizaje.
Otro ejemplo son los laboratorios que son espacios físicos estructurados para atender alguna necesidad específica. Este recurso que proporciona la experiencia práctica de contenidos teóricos, como la enseñanza de gestión, tendencia actualmente. Con el mismo fin de integración teoría-práctica, los simuladores se utilizan cada vez más. La mayor gama de simuladores se dirige al área de gestión, que trabajan temas como planificación estratégica, cadena de suministros, operaciones, marketing, finanzas y gestión de personas. Se utilizan tanto en escuelas y universidades como en educación corporativa.
En vista de que la administración es una ciencia aplicada, los simuladores gerenciales entran como una experiencia única para los alumnos, que normalmente no han tenido contacto con la gestión de empresas en la práctica. Esta experiencia se extiende también para ejecutivos y colaboradores de empresas, que aprovechan para la capacitación y el desarrollo de la visión sistémica de la organización. Los simuladores pueden tener diversas adaptaciones para el análisis de una situación o un mercado, maximizando el aprendizaje del participante y alcanzando los objetivos educativos.
Cada herramienta tiene sus especificidades y es recomendada para determinado público y fin. Sin embargo, todas buscan perfeccionar el aprendizaje y facilitar que se alcancen los objetivos de aprendizaje. Para elegir el mejor recurso, es importante analizar el plan pedagógico, metodología y la adherencia de la herramienta.