Hay varios tipos de simuladores empresariales. Los tradicionales son de industria, comercio y servicios. Pero existen también simuladores específicos, tales como los de empresas del sistema financiero y de agro-negocios. La elección del simulador a ser utilizado depende de varios factores, siendo los principales el foco del curso, la región que la institución de enseñanza está insertada y la habilidad /conocimiento del sector empresarial por parte del profesor.
En cursos regulares de graduación la carga horaria de las disciplinas de simulación normalmente es de 4 horas semanales. Dos estrategias pedagógicas son normalmente utilizadas: Intercalar conceptos gerenciales con prácticas de gestión simulada o realizar dos simulaciones en la disciplina. En ambas estrategias lo ideal es la alternancia de simuladores, como discutiremos a continuación.
Cuando el profesor utiliza la estrategia de dos simulaciones en la misma disciplina, la alternancia de simuladores es crucial, pues proporciona más oportunidad de aprendizaje a los alumnos. Si la estrategia es utilizar sólo una simulación por disciplina, aún la alternancia de simulador es aconsejable. En este caso, el intercambio de simuladores (por ejemplo, de industrial a comercial) ocurre entre semestres para la misma disciplina. Una de las ventajas de este intercambio es cohibir la presentación de trabajos de semestres anteriores. Por ejemplo, un trabajo de planificación estratégica o una planilla de costos para el sector industrial serán diferentes del sector comercial. Otra ventaja es que alumnos reprobados en la disciplina tendrán la oportunidad de experimentar otro tipo de simulación, lo que puede elevar el nivel de compromiso de estos alumnos. Para el profesor el intercambio de simuladores también es benéfico, pues abre su horizonte para nuevas experiencias empresariales.
Considerando las ventajas en el uso de simuladores de diferentes sectores empresariales, sugiero que el profesor busque esta estrategia de enseñanza. Los proveedores de simuladores normalmente ya ofrecen una gama de sectores empresariales a la elección del profesor, lo que facilita la migración entre los simuladores. Primero porque normalmente las interfaces computacionales son comunes. Otro facilitador se refiere al hecho de que las características de algunas áreas gerenciales son muy parecidas. Por ejemplo, en la vida real el área financiera tiene muchas semejanzas entre los diversos sectores empresariales. Así, cuando el modelo de esta área es hecho por un mismo desarrollador de simuladores, la tendencia es que la semejanza sea aún mayor. Lo que facilita el aprendizaje del profesor en el uso del simulador. Finalizando, aconsejo fuertemente a los profesores que aún no hacen uso de más de un simulador, que lo hagan, pues los beneficios son muchos.
Profesor Ricardo Bernard, Ph.D.
